Alguien me pidió que le enseñara el Dharma uno a uno. -“Lo siento”- Le dije, -“No puedo hacer eso”
Es posible para una linterna alumbrar a una sola persona, pues es para uso exclusivo (de una persona). Pero cuando le dices al sol “alumbra sombre mí solamente”, él te dirá “no puedo hacer eso”.
Cuando aparece, el sol necesariamente ilumina todas las cosas.
Todo es igual ante el Dharma de la liberación que ofrece el Buda Amitabha. Es como el sol, el cual ilumina todo los rincones de la tierra. No existe tal cosa como transmisión exclusiva. Esta enseñanza no contiene secretos, ni tampoco surge la pregunta de si alguien es digno de escucharla o la necesita. Así que este sendero del Dharma no es un “sendero de linterna”. En cambio es una enseñanza universal, cuya luz sobrepasa la del sol y la luna.